dimecres, 18 de març del 2009

"ONG" de I+D+i

ballenas.jpgTengo desde hace meses una espina clavada que no consigo sacarme de encima, y la hago pública con la esperanza de que con vuestras ideas y el crowdsourcing consiga darle forma. He hablado en alguna ocasión de montar un  vivero de cooperativas de base tecnológica con un enfoque de economía social para ayudar a emprendedores y cooperativas aprovechando diferentes experiencias que recoge el post. También he hablado de I+D y cooperación con países económicamente menos desarrollados, y como muestra aquí tenenmos  Ingeniería sin Fronteras o similares. Pero no es de este tipo de cooperación de lo que quiero hablar en este post.

Para centrar el tema podría empezar hablando de SECOT (Seniors Españoles para la Cooperación Técnica, ojo!, no confundir con la patronal CECOT). Secot es una asociación de personas en principio jubiladas, ex-empresarios, que ofrecen asesoramiento a ONG, pymes y a personas emprendedoras que no pueden acceder a los canales habituales de asesoramiento privado. Está claro, estas personas u organizaciones siempre pueden acceder a asesoramiento público de primer nivel pero llega un punto en que este asesoramiento público no puede dar respuesta a la necesidad de la pyme (micropyme en general) o de la persona emprendedora. 

Otros ejemplos de orientación de Tercer Sector, ONG u definiciones similares combinada con tecnología en el ámbito TIC pueden ser Fundación Chandra con, entre otros servicios, su interesantísimo Laboratorio de Innovación Social, o bien iwith.org. Son en general fundaciones u otras figuras jurídicas sin ánimo de lucro que tienen como objetivo conseguir que ciudadanos, empresas (en algunos casos) e instituciones utilicen las nuevas tecnologías de la información en beneficio del desarrollo social. Estos proyectos acostumbran a contar con el apoyo de las diferentes agencias de cooperación y de asuntos sociales.

Y después de esta introducción, os presento mis dudas que en este momento son dos (o las puedo sintetizar en dos, mejor dicho).

La primera pregunta. Cuando una organización son o sin ánimo de lucro tiene voluntad de innovar adentrándose en mayor o menor grado en el ámbito de la I+D, o en servicios o en cualquier modalidad, y no tiene recursos para iniciar este proceso, quién le ayuda? Me podréis decir que existen muchas puertas en la administración donde llamar, pero no son en realidad tantas. Las administraciones locales tienen desde hace algunos años técnicos en creación de empresa (microempresarios por necesidad en su mayor parte) pero no en gestión de la innovación ni en temas relacionados con la I+D, propiedad intelectual.... Algunos de los cursos que imparto para técnicos de Diputaciones van en este sentido. También las asociaciones empresariales pueden ayudar, pero puede pasar algo parecido a lo que he comentado, que para el primer nivel sirven pero para ir más allá y ejercer de médico de cabecera no tanto. Y no queda más remedio que ir a la consultora de turno, probar uno mismo o desistir.

La administración es reticente a crear redes de asesores en innovación entre otras cosas porque serían difíciles de encontrar. Para el asesoramiento en creación de empresas se buscan en los concursos públicos de contratación perfiles de ADE, pero qué perfiles profesinales se buscarían para asesores de  I+D+i? Ingenieros/as que no ven en la carrera ni una sola asignatura relacionada con la innovación? Esperemos que la reformulación de los grados en el EEES introduzca algun cambio en este sentido.

Y la segunda pregunta es: quién protege y asesora a la sociedad civil sobre los excesos de la tecnología, y quién proporciona tecnología a la sociedad civil contra los excesos de la administración y del capital privado? En el primer caso pongo como ejemplo la nanotecnología, las antenas de telefonía móvil, el sonar de los submarinos (y su relación con la desorientación de los cetáceos y su sordera) o las vacunas. La ciencia y la tecnología avanza y puede ser beneficiosa, pero también puede causar daño al ambiente y las personas. Y no siempre la administración está a favor de la ciudadanía sino que, como sabéis, puede verse presionada por poderosos lobbies industriales.  Una iniciativa que surgió hace unos años pero que no ha cuajado demasiado en nuestro país son las science-shops, entidades vinculadas a las universidades que pretenden ofrecer de manera gratuita asesoramiento científico sobre diferentes temas.

Vista la evolución de la educación, el talento científico-tecnológico es hoy y será en el futuro un bien escaso -y caro- en nuestra sociedad. Cada vez más información y ubicuidad pero menos conocimiento. Alguien debería luchar para que todas las organizaciones y la sociedad civil puedan acceder a él. El reciente Foro sobre el Talento de Navarra (documentos interesantes aunque no exactamente desde mi punto de vista)  coincide conmigo sobre la importancia de valorar y hacer crecer este talento, aunque no sé si hasta el extremo de convertirlo en un derecho de todo ciudadano, con o sin recursos.

La imagen es de www.derechoanimal.es

1 comentari:

  1. mmm,un vivero de cooperativas de base tecnológica? cuenta con nosotros si podemos ayudar en alguna cosa.

    Por otra parte tienes mucha razón en cuanto a la innovación y su financiación. Un placer leerte.
    Ramon Bartomeus
    Resources manager
    Iwith.org

    ResponElimina